Habitación de Aiken

Su hermana está plácidamente durmiendo o empanada en su habitación. No parece haber nadie más en la casa. Bueno, sí, Dorota, pero ésa no es una bocazas y sabe que tiene prohibida la entrada a su habitación si está él dentro. Asiente levemente mientras empuja un poco la puerta para que se abra más, a la vez que insta a Moore a entrar con una mano en su espalda.

- Claro. Deja aquí todo y... bueno, el baño está dos puertas más allá - claramente, no va a pedir a la chica que se cambie delante suyo. Todavía no hay tanta confianza e_e

Un camisón. Pero no uno de ésos de los que salen en los libros de la señora que le tiene miedo al fantasma y parece que se ha puesto la bata de laboratorio. No. Ése, ehm... le gusta. Respira hond... no, Olviett, que luego vas a tener que controlar tu respiración y te agobias. El encaje también es... bueno, a él le atrae mucho lo cortito que está.

- Ohm. Pero acércate. Tienes que saber... posar. - Eso hacen las modelos, ¿no? Posar y... esas cosas e__e Desfilar, se llamaba. E irse con el fotógrafo. Megde, tenía que haber traído una cámara. - Camina.

Hm. Se levanta. Hoy no lleva pantalones ajustados, ¿no? Perfecto. Camina hacia Kylian y la rodea hasta quedarse detrás suyo. Tira un poco de su brazo hacia abajo. Tsk, que las modelos no se quedan rígidas como un palo. Más... soltura, eso. Y el camisón *-*

- Ehm... - ¿qué iba a decir? Rebobina un poco en el tiempo. Ah, sí. - Más... natural. Tiene que parecer que te lo estás pasando bien siendo modelo. Hay que seducir a la gente desde la revista. Eso es.

Lo cierto es que Moore no necesita seducir a nadie. Jo. Mira que tiene que hacer esfuerzos para no inclinarse.

Sí, mucho mejor. Ahora sólo tiene que acercarse leentamente, cogerle de la corbata del colegio (porque sí, lleva el uniforme) y... tumbarle, eso, que seguro que se habrá dado cuenta de que está cansado y quiere dormir en la cama. Pero para dormir en la cama primero tiene que estar en ella. Sonríe levemente, alejándose unos pasos. Hm. Qué mal lleva uno eso de "se mira pero no se toca". Matará a quien inventó la dichosa frase.

- Sí... ahora tienes que desfilar. Ya sabes, caminas, un par de poses y te... Bueno, te lo quitas. Llevas algo debajo, ¿verdad? - se sienta en el borde de su cama de nuevo. Es que pensar lo que tiene que decir es cansado.

Moore parece cambiarse en dos segundos. Vaya. Es la única mujer que hace eso, por lo menos que él sepa. No obstante, parpadea al ver asomarse su cabeza y decir eso. Eehé. ¿Y no le da cosa estar medio fuera en el pasillo donde podría verle cualquiera de su familia? Ñe.

- ¿Por qué? No creo que estés mal. - vamos, si resulta que la pelirroja tiene complejos ya se encargará él de darle collejas hasta que salgan de ahí. No irá a cortarse ahora e__e

Vuelve a levantarse, caminando leentamente alrededor de Moore. Bien. Se preguntaría si hay alguno que no le quede bien pero sólo ha visto dos. Aunque ese tirante lo ve un poco... se detiene y acaricia suavemente el hombro de la chica desde detrás. Lo dicho, que se cae. Seguro que le ha robado a la de la tienda el sujetador y por eso ahora no le va bien.

- Mejor. Mucho mejor. - murmura. Aunque lo cierto es que el camisónle quedaba más... cómo decirlo. No es exactamente sexy. Y sí, hay confianza. Toda la confianza del mundo

Peero él detiene la mano de Kylian, con lo que la chica no se coloca ningún tirante. Niega levemente con la cabeza. Ni "Eh" ni leches. Si quiere su opinión y recomendación (Que no dará, claro. Moore es toda suya) tendrá que aceptarla, vamos. Que sabe delo tema. Al final acabará sacando una de sus revistas para que Kyl tome ejemplo y todo, tsk. Revistas de... cosas de casa. Jardines, conejitos, florecillas, un sofá... esas cosas e__e

- Déjalo mejor así. Posa, a ver qué tal te queda. Eso sí, el colorete fuera.

No opina. Se tumba en su cama, con la cabeza asomando por el borde, y saca la esquinita de algo de debajo del mueble. Ahám. Le lanza a Kylian una bonita revista de lencería. Que conste que no es suya; se la ha encontrado por ahí hoy mismo e__e Peero es que no estaba mal. Hay una que incluso se parece a Erika.

- Anda, coge ideas de ahí. - la mayoría están en una cama pero bueno, no le supone ningún problema. Es grande. Él puede estar en un lado y la chica en el otro. - Supongo que no es fácil.

Ahám. Se acerca por detrás y apoya un brazo al otro lado de la espalda de Kylian mientras que con la otra mano pasa la página mientras murmura "Bien, bien". Peero es que él también quiere ver. Cosa estúpida teniendo a la pelirroja casi debajo suyo, pero uno tiene que disimular. La vida es cruel. Sigue pasando páginas, esperando a que la chica pille otra pose.

- Nada mal. - murmura, depositando un beso en su pelo. Es curioso. Normalmente el que está casi desnudo es él y no al revés. Pero claro, Moore aún no sabe robar camisas.

Anda. No se había fijado en el tío cuando la hojeó. Al parecer estar con tanta mujer da sus frutos. Tsé. Se deja caer de espaldas al lado de Kylian, boca arriba. Él lo que tiene que hacer es, ehm... mirarla, sí. A veces se pregunta cómo demonios aguantan los de las revistas de modelos. O a lo mejor las fotos son justo el instante antes. O no se gustan.

- Claro. - que no se note que ya se lo está imaginando, claro. Últimamente su mente, ehm... imagina demasiado.